Durante el día la piel suele acumular restos de crema hidratante, de maquillaje, la contaminación de la calle y demás partículas que ensucian y obstruyen los poros de la piel del rostro. Por eso es importante adoptar un pequeño ritual de limpieza al final del día para brindarle higiene y frescura a nuestro rostro. Sin embargo para completar este proceso de higiene facial lo ideal es recurrir a una limpieza profesional para realizar un tratamiento más profundo y personalizado.
La limpieza facial profunda es un procedimiento de mantenimiento que elimina todas las impurezas que se encuentran en la piel generadas por el mismo cuerpo y por el ambiente. Estas impurezas son el origen de imperfecciones, acné, arrugas prematuras y pérdida de brillo.
BENEFICIOS DE LA LIMPIEZA FACIAL
1. La limpieza facial permite la oxigenación de la piel.
2. Retrasa la aparición de arrugas líneas de expresión.
3. Elimina el acné y los puntos negros.
4. La limpieza facial mejora el aspecto de la piel, haciéndola lucir mucho más suave y tersa.
5. La piel es más luminosa.
Otro de los beneficios de la limpieza facial es que una vez que finaliza el tratamiento de limpieza, la piel está preparada para aprovechar al máximo todas las propiedades que nos ofrecen los productos cosméticos; esto se debe a que mediante la limpieza queda más hidratada, se eliminan toxinas y mejora la circulación del rostro.